1. El comercio:
Muchos venezolanos, por ignorancia o por moda, han estado celebrando el 21 de Diciembre, un Ritual del Espíritu de la Navidad, creyendo que esto no contradice su fe cristiana, pues la palabra Navidad, les hace pensar en la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo celebrada el 25 de Diciembre. El comercio que se ha logrado con esta moda es enorme, se venden estatuillas del Espíritu de la Navidad de todos los tamaños y colores.
Existen numerosas historias sobre el Maestro de la Natividad, una de ella es que fue un viajero errante que llegó a la Tierra para revelar los secretos de otras galaxias. Se le asocia con un viejito parecido a San Nicolás, pero con una vestimenta y un sombrero como del mago Merlín. Se han vendido también varios rituales, e inclusive, una cajita llamada The Wishes Kit, o “Caja de los Deseos”, con artículos ligados al ritual.
2. El mito:
El día 21 de Diciembre, es el día del Solsticio de invierno, día en que el Sol se encuentra más alejado de la tierra y por tanto, es la noche más larga del año. Según el ritual metafísico contenido en The Wishes Kit, es una noche de abundancia y de crecimiento espiritual, en la que las fuerzas cósmicas, Ángeles y Arcángeles, rinden culto al Señor del Universo y baja el Espíritu de la Navidad con la misión de dar.
Según la supuesta comunicación de un tal Maestro Ascendido Uriel, hace muchos años, llegó a Escandinavia, procedente de otra galaxia, un ser alto, bello, juvenil, alegre y con un brillo rojo dorado. Este ser tomaba de la “Sustancia Universal” una gran cantidad de piedras energéticas que repartía entre la gente, pero como la gente había olvidado “su perfecta coordinación con lo divino”, debido a la ambición de lo material, este y otros seres de Luz se retiraron de la tierra. Sin embargo el Espíritu de la Navidad, se acerca el 21 de Diciembre a las 12 de la noche, para regalar abundancia, paz y unión.
3. El rito:
La popular cajita, contiene distintos artículos supuestamente purificados y energizados, para que la cosa resulte. Siete velas de diferentes colores, siete piedras, dos varas de incienso de mandarina, cinco hojitas de papel de distintos colores en donde se escribirán deseos, y un frasquito con aceite de mandarina. Se recomienda que los participantes lleguen purificados, esto es, bañados, relajados, vestidos de blanco y perfumados con aceite de mandarina, después de haber realizado meditación. No se vale una cajita para todos, cada cual tiene que tener la suya y no dejarse tocar los perolitos por otra persona.
En la presencia del Yo Soy, el encargado de presidir invoca al Espíritu de la Navidad, enciende una vela, lee textos de la Biblia. La gente quema papelitos con lo que desea eliminar, luego los participantes invocan a los ángeles del Fuego Violeta. Prenden las velas una por una, mientras invocan a distintos ángeles, unos con nombres bíblicos y otros con otros nombres y van poniendo al lado de cada vela una piedra.
4. El dictamen de la Iglesia:
La verdad es que ese ritual no es otra cosa que un ritual espiritista, y según lo comentó una vez Monseñor Ignacio Velasco “un conjunto de enseñanzas sutiles y de prácticas ingeniosas que tratan de apartar a las familias y a los grupos en general, de una celebración centrada en el nacimiento del Hijo de Dios, y de desviar el significado de la fiesta navideña, hacia la contemplación de figuras fantasmagóricas, y prácticas etéreas ligadas a los fenómenos atmosféricos...”
Según Monseñor Mario Moronta, “Es una especie de robo de derechos de autor, para apropiarse de algo genuinamente cristiano”. Según Monseñor Jorge Villasmil, este ritual revela “una concepción primitiva de la religiosidad típica de quienes esperan que las cosas les caigan del cielo.” Monseñor Ovidio Pérez Morales dice que el ritual, intenta “evaporar el acontecimiento Cristo para sustituirlo por un espíritu en la línea del espiritismo, con prácticas que suenan a brujería y a encantamientos mágicos.”
En conclusión, los cristianos NO CELEBRAMOS EL RITUAL DEL ESPÍRITU DE LA NAVIDAD, ni ponemos su imagen en nuestras casas, sólo celebramos la NAVIDAD DE CRISTO EL 24 DE DICIEMBRE EN LA NOCHE