miércoles, 6 de febrero de 2013

Ofrendas, limosnas, diezmos y colecta







Aprendamos a diferenciar términos

1.-DIEZMO: Hace referencia en el Antiguo Testamento, es decir antes de Cristo a un porcentaje de cosechas, frutos o especies
El diezmo entero de la tierra, tanto de las semillas como de los frutos de los árboles, es de Yavé (Dios), es cosa sagrada para él; (Levítico 27,30)

Cada año separarás el diezmo de todo lo que hayas sembrado y que haya crecido en tus tierras. (Deuteronomio 14,22)

Jesucristo critica a los judíos acordarse del diezmo y olvidar la justicia, la misericordia y la fe:
¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, que son unos hipócritas! Ustedes pagan el diezmo hasta sobre la menta, el anís y el comino, pero no cumplen la Ley en lo que realmente tiene peso: la justicia, la misericordia y la fe. Ahí está lo que ustedes debían poner por obra, sin descartar lo otro. (Evangelio según San Mateo 23,23)

Pero somos los cristianos quienes ya en la Biblia, cambiamos el diezmo por las colectas como lo veremos al final

2.-LIMOSNA: Se mantiene vigente en la actualidad, y  se considera una obra de misericordia para con los pobres, aunque en la actualidad, la tendencia es a enseñar a pescar antes que a dar el pescado, lo cual dignifica más  a la persona, al menos que esta se encuentre incapacitada para conseguir por sí misma el fruto de su trabajo

Con tus bienes haz limosna en beneficio de todos los que practican la justicia y el bien, y no vuelvas la cara al pobre, para que el Señor no aparte su rostro de ti. (Tobías 4,7)

Da limosna según tus posibilidades. (Tobías 4,8)

Además, para el que da, su limosna le queda como un precioso depósito ante el Altísimo. (Tobías 4,11)

No discutas con el desesperado, ni dejes que el necesitado suspire por tu limosna. (Sirácides (Eclesiástico) 4,3)

Tu limosna quedará en secreto. Y tu Padre, que ve en lo secreto, te premiará. (Evangelio según San Mateo 6,4)

3.-OFRENDA: Contribución espontanea adicional del pueblo para el Templo, el sentido original de la ofrenda permanece vigente en la actualidad

«Pide a los israelitas que me ofrezcan una contribución. Tú recibirás todas sus ofrendas voluntarias. (Exodo 25,2)
Entonces le ofrecerán a Yavé sacrificios por el fuego, holocaustos o sacrificios de comunión, le ofrecerán sacrificios de agradable olor, de ganada mayor o menor, con ocasión de un voto o de una fiesta, o como ofrendas voluntarias. (Números 15,3)

Y el pueblo se alegró por estas ofrendas voluntarias; porque de todo corazón lo habían ofrecido espontáneamente a Yavé. También el rey David tuvo una gran alegría. (1 Crónicas 29,9)

4.-Colecta: En el Nuevo Testamento (Después de Cristo) se sustituyó el diezmo por la COLECTA. NUNCA aparece el DIEZMO en el Nuevo Testamento, en su defecto aparece la palabra COLECTA como veremos a continuación:

Cada domingo, cada uno de ustedes ponga aparte lo que pueda, y no esperen a que yo llegue para recoger la colecta. (1º Carta a los Corintios 16,2)

Cada uno dé SEGÚN LO DECIDIÓ PERSONALMENTE, y no de mala gana o a la fuerza, pues Dios ama al que da con corazón alegre. 2Corintios 9,7.

Cuando existe EL BUEN PROPÓSITO, CON LO QUE TENGA CADA UNO es bien recibido y no se le pide lo que no tiene.( 2Corintios 8,12)

El problema del Diezmo en las sectas es que:

1. Se utiliza el Antiguo Testamento para apoyar una tesis de "prosperidad mercantilista" manipuladora donde el único que se enriquece es el Pastor

2. Estas entradas no son supervisadas por ninguna instancia superior, como en el caso de la Iglesia Católica, sino que cada Pastor monta su tarantín, y convierten a a Iglesia de Cristo en una empresa de lucro personal

3. Mientras tanto desde su púlpito, estos pastores millonarios, cuyas entradas en el mundo entero sobre todo en Norteamérica superan infinitamente más a las de la Iglesia Católica, critican las riquezas artísticas de los museos vaticanos, fuente de trabajo para los restauradores, curadores de obras e ingreso turístico para el pueblo de Roma y la supuesta idolatría de las imágenes religiosas católicas, postrándose ellos ante el Dios Dinero cosechado a expensas de sus súbditos sumisos.