sábado, 5 de diciembre de 2015

Con estos Testigos perdemos votos




Esta mañana, los Testigos de Jehová, pasaron a dejar las respectivas revistas Atalaya y Despertad. Nada mejor para definirlos: La “Atalaya”, (torre) donde se sitúan para juzgar a las demás religiones e iglesias con un ensañamiento especial contra la nuestra y “Despertad”, por la costumbre de tocar las puertas e insistir en su predicación cuando tal vez quiera uno dormir un poco más por la razón que sea. Carlos el portero les recibió las revistas me las dio. Estos audaces hombres de corbata, mujeres en faldas y paraguas respectivos y niños amaestrados con la mejor intención (la creo de los propagadores de esa secta, no así del cuerpo directivo) pensarían: “A lo mejor se convierte el padre.”
Hay algunas cosas que se pueden deducir con una simple lectura de su folleto colorido de Diciembre de 2105.
1. De las 8 páginas de la revista “Atalaya”, 5 están dedicadas a criticar a la iglesia Católica y a los demás cristianos en general y esto es muy común en todas sus publicaciones. De aquí deduzco que si la Iglesia Católica no existiera, ellos perderían su razón de ser, porque en la mayor parte de sus publicaciones prevalece una obsesión por nosotros y contra nosotros, son como una novia decepcionada cuya vida consiste en hablar mal de su ex.
2. Ellos acusan a nuestra iglesia de “dogmática” es decir, de imponer un pensamiento único que debe ser acatado por todos. Si bien es verdad que la identidad católica supone unos elementos mínimos de identidad como en todas las iglesias (doctrina, ritos y leyes morales), hay diversidad de criterios respecto a otros temas. En cualquier publicación católica, los escritores, incluyéndome, opinamos sobre lo que es “opinable”. En palabras de San Agustín: En lo esencial unidad, en lo relativo “libertad”, en todo caridad. Pero apenas leemos la revista Atalaya (haga la prueba) encontramos que ninguna publicación tiene autor. Un pensamiento monolítico se impone desde la sede central de la Watchtower Bible and Tract Society of New York en Brooklin. Es decir dogmáticos hasta la médula.
3. ¡Cuánta hipocresía! Se llama uno de sus artículos. Sorpresa, un testigo de Jehová disfrazado de cura, fumando y bebiendo, prestó su imagen para ser infografiada. Cita textual del artículo “quien se pone a señalar las faltas de los demás, aunque las suyas sean mucho peores, está aparentando algo que en realidad no es”, en el artículo animan a no juzgar a los demás y terminan juzgando a las demás iglesias. Perfectos pues, caen en el mismo error que condenan.
4. En el siguiente artículo apuntan al papa y al papado con los mismos argumentos de siempre, descalifican el liderazgo que evidentemente tuvo Pedro en los primeros cristianos y sus sucesores hasta el día de hoy. Creen que confundimos a Cristo, Piedra angular de la iglesia, afirmación en que estamos clarísimos, con el liderazgo de Pedro, la “roca de la iglesia”, cosa distinta, que ellos no han terminado de entender.
5. Finalmente, los Testigos del “NO”, como sabiamente les califican el resto de iglesias cristianas, mandan a la porra a “la Navidad” con la antigua cantaleta de que el 25 de Diciembre era la fiesta del Dios Sol pagano. Claro que sí lo era, por esa razón los cristianos celebramos ese día a aquel de quien dijo Zacarías “Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el Sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte y para guiar nuestros pasos por el camino de la Paz.” Lucas 1,78-79
6. ¿Por qué les llaman los Testigos del No?. Muy sencillo:
NO fueron fundados por Cristo ni mucho menos antes de Cristo como algunos de ellos, más atrevidos suelen decir, sino por el estadounidense Charles Taze Russell en 1870. Su Biblia NO es la BIBLIA. No solamente está incompleta y mal traducida sino que cambia todos los pasajes donde aparece claramente la divinidad de Cristo. ¿Sabes por qué no se llama Biblia lo que ellos usan como Biblia?, porque su traducción perdió un juicio en Norteamérica, por el cual tuvieron que quitarle el nombre de Biblia y ponerle “Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras”.
Dicen que NO existe la Santísima Trinidad, que Jesucristo NO es Dios, que el Espíritu Santo NO es Dios. Si usted es Testigo de Jehová NO puede recibir donaciones de sangre ni permitir que le donen sangre a alguien de su familia porque en su pésima interpretación de la Biblia suponen que Dios la prohíbe. NO tienen ninguna obra de caridad institucional, NI orfanatos, NI ancianatos, NI obras sociales, NI hogares de recuperación de nada, porque piensan que lo que salva es predicar.
Que NO celebren cumpleaños, que NO canten el Himno, que NO hagan honores a la bandera Venezolana, se puede justificar. Esas son las creencias de su secta, pero que en nombre de su “Jehová” NO voten mañana es imperdonable y lamentable. En este momento su postura NO política, su aparente imparcialidad es un acto suicida, porque en este barco vamos todos.
A ellos les importa poco la frase de Dante Alighieri: “Los lugares más oscuros del infierno están reservados para aquellos que mantienen su neutralidad en épocas de crisis moral” porque NO creen en el infierno en la otra vida, pero están colaborando con el infierno en esta. Tal vez por eso es que los Testigos de Jehová, para quienes todas las demás Iglesias y todos los gobiernos están en poder del demonio, prosperan tanto donde quiera que haya dictaduras. Menos mal que al papel periódico de sus publicaciones se le pueden dar muchos usos en tiempos de escasez.